Este post pertenece a la serie de artículos que exploran ideas extraídas del libro In the Realm of Hungry Ghosts: Close Encounters with Addiction del Dr. Gabor Maté sobre la adicción.

 

UNOS SE HACEN ADICTOS Y OTROS NO

En términos generales, si vives en Occidente, vives en una sociedad abundante de recursos. Podemos conseguir cualquier cosa, en cualquier lugar recóndito, a cualquier hora del día. Todo está  a un click de distancia. Esto se hace obvio con la comida: neveras y despensas llenas en casa; una panadería, cafetería, restaurante, supermercado en cada esquina de la calle; y ya no hace falta ni salir: los riders te lo traen a la puerta de tu casa.

Todos vivimos en este ambiente; no obstante, unas personas tienen tendencia al sobrepeso y obesidad  y otras no; unas tienen capacidad de autocontrol y otras no. La diferencia no se debe solo a la «falta de voluntad» o «falta de educación», sino a una vulnerabilidad subyacente.

Lo mismo ocurre con la adicción: las drogas por si solas no causan adicción. Muchas personas han probado algún tipo de dorga a lo largo de su vida sin volverse adictas. Y donde digo drogas, podría decir videojuegos, póker, etc…

Parafraseando al autor del libro: nunca culparíamos a la baraja de cartas de causar adicción. De ahí que no podemos culpar únicamente a las drogas de las adicciones a estas sustancias. Si alguien se hace adicto, es porque ya estaba en riesgo previo al consumo.

«La adicción es un problema humano que reside en las personas, no en la droga ni en la capacidad de la droga para producir efectos físicos».- Lance Dodes (Psiquiatra de la Facultad de Medicina de Harvard).

Asimismo, se ha visto que vivir en un ambiente estresante (guerras, exclusión social, problemas financieros, familias desestructuradas…) está asociado a la adicción. Sin embargo, al igual que con las drogas, los ambientes estresantes (sin importar cuán severos sean), por si solos, tampoco son suficientes.

El Dr. Maté expone que para que se produzca la adicción deben coincidir tres factores:

  • Un organismo susceptible;
  • Una droga con potencial adictivo; y
  • Estrés.